Por Lain E. Pardo
La palabra conservación se ha convertido en una de las más populares en estos tiempos donde la naturaleza y sus recursos atraviesan una crisis profunda. Sin embargo, al mismo tiempo se ha generalizado tanto que en la percepción de la gente parece ser un concepto simplista de “no tocar”.
La ciencia de la conservación es más compleja y en algunas situaciones requiere abandonar nuestras percepciones románticas de la vida silvestre para centrarse en lo realmente importante. Esto implica en ciertas circunstancias aceptar la paradoja de ver la muerte como parte de la solución. Este ensayo hace parte de una serie destinada a mostrar lo complicado que puede ser la conservación de vida silvestre al momento de tomar decisiones que beneficien la sociedad y las especies silvestres.